QUEDO DEMOSTRADO QUE LAS CARRERAS SON DE AUTOS

Si hacía falta aclarar mas el tema, o demostrar que Hamilton viene corriendo hace años con el “caballo del comisario”, y que con ese auto la mayoría de los pilotos de la Fórmula uno puede ganar. Ni siquiera Valtteri Bottas tiene un auto parecido, y cuando lo tuvo le dio mas de un dolor de cabeza a Hamilton y a Mercedes. Lo de este domingo fue lo más parecido a un boicot y “mataron dos pájaros de un tiro”. Una vergüenza.

Una gran largada de George Russell (Mercedes) lo colocó en la cima de la carrera por delante de Valtteri Bottas (Mercedes), pero el comienzo del Gran premio de Sakhir se vio opacado en los primeros metros cuando Charles Leclerc (Ferrari) colisionó contra Sergio Pérez (Racing Point), cuando el mexicano había superado a Max Verstappen (Red Bull), quien también debió abandonar, al igual que el monegasco. Checo pasó por los boxes y retornó a pista en el puesto 18°.

Una carrera diferente comenzó cuando se guardó el Auto de Seguridad, con los tres pilotos que podían discutirle algo a los Mercedes. Carlos Sainz (McLaren) lo intentó y estuvo a punto de superar al finlandés, pero las posiciones se mantuvieron intactas gracias a una buena defensa de Bottas. Adelante, Russell le atendía de maravillas el negocio a Lewis Hamilton, cumpliendo sus funciones con la misma contundencia que el Campeón.

Daniel Ricciardo (Renault) y Daniil Kvyat (Alpha Tauri) se mantenían expectantes en el cuarto y quinto puesto, mientras el mexicano ya superaba a Sebastían Vettel (Ferrari) por el puesto 11° al cumplirse la primera docena de vueltas en Bahrein. En una carrera que se mostraba extremadamente lineal, el único auto que ascendía en el clasificador era el rosado de Pérez, que se motraba con buen ritmo y más veloz que los autos que tenía por delante.

El empuje de Pérez hacía que Alexander Albon (Red Bull) buscara superar a Lando Norris (McLaren) para buscar aire. En una misma maniobra, Checo y el británico dieron cuenta del McLaren, visiblemente más lento que ambos. Pero el de Racing Point no descansaría en su búsqueda de retornar a los puestos importantes: en la vuelta siguiente ascendió al puesto 9° en una buena acción por la parte externa del tailandés.

Una lenta detención en boxes de Carlos Sainz, lo derivó al noveno lugar y lo propio sucedió con Ricciardo, quien salió justo detrás del español. Perez era quinto, con una detención, a diferencia de Russell, Bottas, Lance Stroll (Racing Point) y Esteban Ocon (Renault), quienes lo precedían en la pista.

El meridiano de una carrera a 87 vueltas, mostró nuevamente a Sergio Pérez en puestos de podio, luego de haber caído al puesto 18° en el inicio. Pero el mexicano cumplió con su segunda detención, que lo depositó en el noveno lugar. Un despiste de Nicholas Latifi (Williams) sumaba el tercer abandono de la noche.

– – – A rio revuelto: ganancia de Pérez

En la vuelta 57 Checo se postulaba al “Piloto del Día” superando primero a su compañero Stroll y luego a Ocon para retornar nuevamente al tercer puesto detrás de los “Black Arrows”, que parecían inalterables, pero un pinchazo de Russell y una bandera amarilla cambiarían rotundamente el final de esta historia: El drama llegó en la vuelta 63, con Autó de seguridad nuevamente en pista por accidente del Williams del debutante Jack Aitken. El equipo Mercedes decidió llamar a sus pilotos para realizar cambio de neumáticos y allí todo se descontroló cuando entraron uno detrás del otro y los mecanicos, apurados por la situación, confundieron las gomas con Russell primero mientras y con Bottas después, además de lidiar por demás con el delantero izquierdo.

En la pista, Sergio Pérez tomaba el mando de una carrera que lo vio en los dos polos en diferentes periodos y logró una gran recuperación. Russell intentó recuperar terreno ante Stroll y Ocon, pero nadie pudo con Pérez, que decretó su primera victoria en el Gran Circo. Esteban Ocon y Lance Stroll lo acompañaron en el podio.